Dándole la vuelta a la manzana: Un tributo a Steve Jobs
Existe todo un estereotipo respecto a la manera en que los usuarios de ordenadores y dispositivos de Apple vemos a la compañía de la manzana y al que, hasta hace poco, era su mandamás. Inclusive, existen estudios que afirman que para el cerebro de un fanboy la religión que profesa y Apple son indistintos entre sí, pero, como todo estereotipo, aseverar que todos somos así es incorrecto.
A pesar de eso, nadie puede discutir que Apple es una empresa importante y que Steve Jobs es uno de los hombres de negocio contemporáneos más exitosos que hemos visto, no solo como líder y portavoz de Apple, sino en sus muchas otras facetas —y no está mal reconocerlo—. Su compromiso con la marca que creó, su inteligencia y atención por el detalle han inspirado a muchas personas, entre las que destacan: John Sculley, expresidente de PepsiCo. al que Jobs convenció de pasarse a Apple con la famosísima frase: «¿Quieres seguir vendiendo agua azucarada por el resto de tu vida o venir conmigo y cambiar el mundo?«; Vic Gundotra, vicepresidente Senior de Google, quien recuerda una llamada de Steve en domingo para decirle que el gradiente de amarillo del ícono de su aplicación para iPhone no estaba bien; así como miles y miles de usuarios que, debido a los productos de Apple, tienen una calidad de vida mejor, como Holly Bligh, quien gracias al iPad puede asistir a la escuela como los demás niños. Después de todo, «la tecnología no es nada si no está unida con las artes liberales, si no está ‘casada’ con la humanidad«.
Joseph Tame es uno de esos usuarios que se han sentido inspirados por Steve y, según sus propias palabras, también es uno de los que se han visto beneficiados gracias a los productos de Apple. Debido a esto y a su pasión por hacer figuras mientras corre, tenemos un muy curioso tributo dedicado a Steve, el cual pueden apreciar en la imagen superior.
Joseph nos cuenta que para hacer todas sus figuras utiliza RunKeeper, una aplicación que con ayuda del GPS toma un registro de cada paso que realiza y a su vez registra aspectos muy importantes a monitorear mientras corre, como lo son la elevación, ritmo, velocidad y frecuencia cardiaca.
Para formar el logotipo de Apple, eligió el centro de Tokyo bajando por el lado oeste del Palacio Imperial, pasando por Roppongi y Omotesando, para después subir por Shinjuku. La hoja de la manzana pertenece a Kagurazaka y su punto de inicio y meta tomó lugar en el Santuario Yasukuni, corriendo un total de 21 Km.
¿A ustedes que les parece este singular tributo?
Vía: Josephta.me